abandonada en la calle
como una palabra que nadie ha dicho
aún el día ilumina
la desnudez que exhibe el verso
bajo el trapo que apenas cubre
hierro, madera y carne,
palabras a la espera de su caída,
a la espera de la sábana negra
con que afrontar la noche y la invisibilidad
yo te he visto
bajo la luz de un sol indiferente
te he mirado, sin voluntad ni amor
y he oído acercarse a tus ojos
los golpes de ala del buitre sordo, del poema,
de la culpa
estertores de la palabra y el papel