—a Vladimir Maiakovski
y ella dijo: “capitalista desalmado”
y todos los perros y las perras comenzaron a aullar,
la luna estaba ahí, y sonreía,
e incluso el perro guardián, con su fular de correa
oliéndole el culo a su amigo, dijo: “pues que va,
es el único mundo posible”
es el poder de la palabra nombrar a dios
y lo es también nombrar la alambrada de luz,
ambos, dios y alambrada, son invisibles
pero circundan nuestras vidas con sus manos de sangre
la palabra no es nada
si hay una estrella que la niegue,
por eso, ella dijo: “capitalista desalmado”,
porque nadie puede negarla
sin mentir,
y el universo es
indiferente.
posdata,
"la liviandad del espíritu tierno y violento
la elección ética primitiva
la garantía de perderse siempre
¿qué me queda si me vacían de lo que leí?
y la voz inolvidable del que no necesita
pararse a pensar en lo que desea" 1
1 de la introducción del libro Maiakovski. Conversaciones con el inspector fiscal y otros poemas. Son palabras del introductor, Federico Gorbea, y del propio Maiakovski.